Las ciudades se enfrentan a una serie de retos financieros y prácticos cuando intentan financiar medidas de adaptación para la acción climática. Conozca las soluciones para conseguir financiar sus proyectos de adaptación.
Todo el mundo gasta más en medidas contra el cambio climático. Según el reciente informe de la Iniciativa de Política Clim ática "Global Landscape of Climate Finance: Una década de datos", la financiación mundial de la lucha contra el cambio climático está a punto de alcanzar por primera vez el billón de dólares. Se trata de una buena noticia para nuestro planeta. Sin embargo, la mayor parte de esta financiación se destina a medidas de mitigación del cambio climático, como nuevas energías renovables, eficiencia energética y transporte con bajas emisiones de carbono. Sólo el 5% del total se destina a la adaptación al cambio climático. ¿Por qué tan poco interés en la adaptación? ¿Y cómo puede alcanzar las cotas de financiación de la mitigación?
El bajo nivel de financiación destinada a la adaptación no se debe a la falta de proyectos potenciales. Los retos son más matizados y específicos de la "naturaleza" de los proyectos de adaptación.
Conseguir financiación para la adaptación al cambio climático plantea auténticos retos, pero cada reto es una oportunidad. Para hacer frente a este problema, ciudades de todo el mundo han adoptado enfoques innovadores para financiar la adaptación al cambio climático en sus ciudades. Hemos recopilado algunas de las mejores formas de financiar medidas de adaptación y compartimos ejemplos de ciudades que lideran el camino.
Fondos privados - La mayoría de los habitantes de las ciudades viven en urbanizaciones o bloques de apartamentos diseñados por un promotor desconocido. Los edificios rara vez se han diseñado teniendo en cuenta la adaptación al cambio climático. Los fondos privados son una forma de que los ciudadanos controlen más los proyectos de adaptación climática de su ciudad.
Bonos verdes - La inversión medioambiental, social y de gobernanza (ESG) está creciendo, y los bonos verdes son cada vez más populares entre los fondos de pensiones y los gestores de activos. Las ciudades deben aprovechar esta tendencia y promover la inversión de sus ciudadanos. Los ciudadanos con pensiones podrían indicar a su gestor de fondos que invierta en bonos emitidos por su ciudad local, generando un rendimiento y beneficiándose al mismo tiempo de vivir en una ciudad más verde y limpia.
Incentivos financieros - La concienciación sobre el cambio climático es cada vez mayor, y cada vez más gente quiere participar y poner de su parte. Ofrecer incentivos como subvenciones y desgravaciones fiscales para proyectos de acción por el clima es una forma de conseguir que el público comparta los costes asociados al cambio climático.
Crowdfunding - ¡No hay que subestimar el "poder de la multitud"! El crowdfunding va en aumento, con muchas startups financiadas por miles de inversiones colectivas de particulares. El mismo enfoque puede aplicarse a la financiación de la adaptación al cambio climático. Los ciudadanos pueden reunir pequeñas cantidades de dinero para mejorar su ciudad en beneficio propio y de los demás.
Asociaciones público-privadas, financiación mixta o blending - La acción contra el cambio climático necesitará inversiones considerables en proyectos de adaptación. Para alcanzar este nivel de capital, serán necesarias más asociaciones público-privadas. Este tipo de financiación ha permitido construir importantes proyectos de autopistas y otras grandes infraestructuras como hospitales y escuelas.
La Misión de Adaptación al Cambio Climático es una iniciativa de la Unión Europea que pretende ayudar a las regiones, ciudades y autoridades locales de la UE a aumentar su resiliencia frente a los efectos del cambio climático. Es una de las cinco misiones de la UE, "hermana" de las 100 Ciudades Climáticamente Neutras e Inteligentes para 2030. A continuación se exponen algunas conclusiones de interés para la financiación de medidas de adaptación:
El cambio climático es una batalla en dos frentes. Tenemos que frenar nuestras emisiones para no empeorar la situación. Y tenemos que adaptarnos a los efectos del cambio climático que ya estamos sufriendo. Ambas áreas necesitan un aumento considerable de la inversión si queremos tener alguna posibilidad de vencer al cambio climático. Un gran planteamiento para abordar los retos de la inversión es un enfoque multisolución. En este artículo se explica cómo hacerlo.
La adaptación climática no sólo ayudará a los habitantes de las ciudades a hacer frente a los futuros efectos del cambio climático, sino que también ofrece la oportunidad de hacer nuestras ciudades más agradables y habitables al mismo tiempo. Pensemos en las plazas del agua creando nuevos espacios sociales en las ciudades. Estos proyectos no deben verse como meros proyectos medioambientales de bajos ingresos, sino como proyectos de transformación de la ciudad.
Antonio es Especialista en Acción Climática en Futureproofed. Sus especialidades son la investigación sobre medidas de mitigación y adaptación, la adaptación climática urbana y los datos climáticos locales, entre otras. Cuando no está trabajando duro para ayudar a las ciudades a ser más sostenibles, se le puede encontrar pedaleando por los campos flamencos.
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